jueves, 10 de enero de 2008

La Etrzanintza retira la pistola a un escolta ebrio

La Ertzaintza retira la pistola a un escolta ebrio que se enfrentó al portero de un local
el guardaespaldas se negaba a abonar el importe de la entrada a la discoteca
Los responsables de seguridad del establecimiento se vieron obligados a llamar a la Policía ante el nerviosismo del sujeto

La pelea se formó en la entrada de esta céntrica discoteca de Vitoria.


vitoria. La entrada de las discotecas se ha convertido en los últimos años en un foco habitual de enfrentamientos y desencuentros entre clientes y responsables de los equipos de seguridad de los locales, aunque el pasado sábado tuvo lugar en Vitoria un episodio fuera de lo acostumbrado debido a la naturaleza de su protagonista. La Ertzaintza se vio obligada a requisar el arma y retirar del servicio a un escolta privado que mantuvo una discusión con los porteros de un conocido establecimiento de ocio nocturno de la capital alavesa. Debido a la actitud demostrada por este profesional de la seguridad, la Policía autonómica informó ayer que se ha iniciado un expediente contra el escolta que dio origen al incidente.

Los hechos tuvieron lugar pasadas las 5.30 horas del sábado. Una persona cuya seguridad es supervisada por dos escoltas accedió a la discoteca Círculo de Vitoria, ubicada en la calle General Álava. Las dos personas que, armadas con sendas pistolas, le acompañaban, permanecieron en la puerta a petición de los porteros y no pasó mucho tiempo hasta que se inició una fuerte discusión.

Al parecer, uno de los porteros explicó a la pareja de vigilantes que, dado que ambos trabajaban como escoltas para una empresa privada, estaban obligados a retirar una entrada en taquilla para entrar. Exactamente igual que si se tratara de dos clientes normales. Esta situación no se produce con los escoltas públicos, que disponen de paso libre a todo tipo de recintos.

La sugerencia del portero de la discoteca no fue del agrado de uno de los dos encargados de seguridad, que comenzó, según explicaron testigos de lo sucedido, a mostrarse muy nervioso y a urgir a los porteros a que les dejaran entrar para poder cumplir con su trabajo de acompañamiento, ya que la persona a la que protegían estaba sola en el interior del establecimiento.

La conversación entre ambas partes fue subiendo de tono hasta que se comenzaron a intercambiar insultos y amenazas. En ese momento, los encargados de la seguridad de la discoteca decidieron llamar por teléfono para pedir ayuda a la Ertzaintza.

Cuando los agentes de la Policía autonómica se presentaron en la puerta principal de Círculo observaron que uno de los escoltas implicados en la discusión seguía visiblemente alterado y, según informaron ayer fuentes del Departamento vasco de Interior, que se hallaba "bajo los efectos de bebidas alcohólicas".

Para evitar que la situación empeorara, los ertzainas procedieron a requisar el arma reglamentaria del escolta y le retiraron provisionalmente del servicio, con lo que dejaron la protección de la persona que se encontraba dentro de la discoteca en manos de su compañero. Cumplimentado este trámite, el vigilante abandonó el lugar de los hechos y no se produjeron nuevos incidentes. Los portavoces de la Ertzaintza informaron ayer de la apertura de un expediente al escolta implicado en el suceso.

Fuente:diario alava.

No hay comentarios: